Llegan más Barbies al hogar de La Condesa, a este paso vamos a tener que desalojar de algún lado porque nos quedamos sin sitio en las estanterías... en esta ocasión he rescatado tres muñecas muy míticas ¿Os suenan?
En el capítulo de hoy tenemos un rescate bastante sencillo, identifiqué a las tres muñecas cuando las compré y eso es algo no me suele pasar. Aquí podéis ver a los tres nuevos miembros de la familia y el estado en el que llegaron a casa:
Me costaron algo menos de un euro, compré los tres junto con otras dos muñecas (que veréis en otra ocasión) por 3 euros.
Ya en el mercadillo identifiqué a la primera como una Sindy de Hasbro pero no tenía ni idea del modelo en concreto. La segunda estaba claro que era Megara, la chica protagonista de la peli de Disney Hércules y el tercero es, ni más ni menos, que el prícipe de La Bella y la Bestia con su traje original y en un sorprendente buen estado.
Para mi sorpresa la Sindy llevaba puesto el vestido original de la muñeca Megara y además un bañador por debajo. El gorrito o casco no se puede quitar, está pegado a la cabeza. Además del baño y limpieza de siempre en este caso teníamos una goma de pelo bien enmarañada, finalmente me decidí a cortarla porque era imposible sacarla de otra forma.
Sin goma fue muy sencillo desenredar el pelo, creo que por culpa de esa goma ha perdido bastante cabello y es una pena, yo he intentado salvarle lo más posible.
Es una Sindy Fiji Fidji de la marca Hasbro del año 1995 y es una nadadora, de ahí su adorno en el pelo y su bañador (que es el original que traía puesto, aunque yo he querido ponerla más mona).
La Barbie Megara es del año 97 y tenía un melenón pero estaba hecho un asco, me costó muchísimo desenredar todo el pelo y conseguir que estuviera suave.
Las piernas venían muy sucias pero con el lavado y desinfectado de siempre se eliminó todo rastro.
Traía puestas unas braguitas azules (desconozco si son originales) y tiene las piernas un poquito separadas. Aún así me parece muy original y bonita, diferente a cualquier otra Barbie.
Creo que conserva su pelo tal cual, tiene un flequillo muy largo y complicado así que yo le he hecho un apaño de los míos y la veo preciosa.
El príncipe Adam (he tenido que buscar el nombre) es un ken de 1991 y solamente está un poquito dañado en una mano.
Venía un poco sucio y con el pelo revuelto pero con el baño y el desenredado lo hemos solucionado todo. He decidido que se merece una segunda oportunidad en la vida como hipster con esa melena y le he puesto un buen moño moderno y unas gafas.
Termino con
una imagen de como fueron las tres muñecas con su embalaje original:
¡Nos vemos pronto!